Las rosas rosadas: simbolizan la bondad, la simpatía, la gratitud y la belleza de una persona. Obsequiar una rosa rosada a una persona apreciada es un gesto de cariño, generosidad, respeto, ternura y admiración. También indican gratitud y la ausencia de malos sentimientos e intenciones.
Las Rosas Blancas: representan la pureza, la elegancia y la tranquilidad. Son símbolo de luz por lo que son ideales para ocasiones como aniversarios, para pedir perdón, o para dar un aire fresco, limpio y tranquilo al hogar.